-Me gustaría ser como tú.
Y yo contesté:
-Nunca quieras eso, pide cualquier cosa menos ser como yo. Te lo aseguro, no soy quién crees que soy.

No puedo ganar

Un día una niña me dijo:
-No es justo, ¡no puedes ganar!
-Claro que puedo, gané yo.

Tenía razón, no puedo ganar.
Nunca he podido, ni me lo merezco.